Eran tiempos de sosobra y confucion en el taller. La llegada de un nuevo capataz con su sequito de ayudantes perturbaba la paz de los talleristas existentes y dividia al taller en 2 grupos bien claros y definidos cual friver borra cual independiente ra sin, que se habrian de disputar el control del taller durantes las semanas venideras.
Pero habia un inconventiente... el nuevo capataz sepultaba a los viejos talleristas en un bloque de hielo cuasi irrompible.
Por eso y cuando nadie lo esperaba, nacio un vengandor, un heroe, un embleba, de identidad aun desconocida, algunos lo catalgoron de "el loco del correo" o "el loco del blog" o simplemente "el loco", este loco mandaba mails a diestra y siniestra publicando verdades talleristas. Todos los dias a la mañana el loco nos recibia con nuevo y jugoso mail donde batia muchisimas cosas.
Intentaron callarlo... no pudieron.
Intentaron rastrearlo... no pudieron.
Intentaron bloqueralo... no pudieron.
El loco aparecio cuando quizo y tambien se fue cuando quizo y su leyenda siempre sera recordada en el taller ya que como dice el dicho las leyendas nunca mueren.
lunes, 1 de septiembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario